Paladín de la verdad

El 2021, año marcado por la ansiedad de una post pandemia que no llega, está alcanzado por el arribo de vacunas (41 millones de diciembre a la fecha), y de una economía pendulante entre mala y muy mala (entendible en este contexto, no hay país que afrontó una pandemia con superávit fiscal).

Llegan las elecciones, quizá las de menor importancia en los últimos tiempos. Tanto así que algunos intentan disfrazarlas con consignas estruendosas como “defender la democracia”, o “se viene el comunismo”, etc… cuando lo que buscan defender es su cargo.

“Estamos a 7 bancas de ser Venezuela en Diputados”, dijo Waldo Wolff, quien entiende que Venezuela tiene una democracia plena dado que nada puede salir sin la aprobación de la mayoría de diputados (que son elegidos de manera democrática). Obviamente, si se llegara a esa reflexión a más de un cambiemita, juntista, o como se llame le agarraría un soponcio.

Esa es la actual oposición: un slogan vacío de contenido, que si uno rasca un poquito se encuentra que es todo lo contrario a lo que pregona, como las notas que se contradicen el cuerpo de la entrevista con el título.

No mucho más, de tan mal que gobernó la leona pasa al zoológico de Palermo, Macri está en Cerdeña, sin embargo, la mala administración se dio por el marketing porque lo único que cambiaron es el nombre cambiemos.

Es una paradoja que lo que sea una debilidad en la oposición y se cambia el nombre, sea una fortaleza en el oficialismo en donde mide más el sello Frente de Todos que los candidatos que propone.

Es para destacar el compromiso que tienen con endeudar al país, mientras ellos que son los malos de la película le dicen a la Presidenta del partido que no va a ser cabeza de diputados, y esa mujer lo acepta (a regañadiente) y continua en el espacio. Nosotros, los buenos, le ofrecemos a un ministro ser gobernador de la provincia más importante y rompe con el espacio.

Está claro que la diferencia entre este Gobierno y el anterior es abismal, si nos guiamos por las declaraciones de Macri esto es una gripe un poco más fuerte y la economía no para. No habría mes con congelamiento de tarifas, se podría despedir como comer y descomer (en palabras del ex ministro devenido luego en secretario Triaca), si sos de riesgo y tenés una familia a cargo el macrismo que no hubiera cerrado nada te obligaría a trabajar si tu empleador así lo deseara y si elegís cuidarte y no salir a trabajar, probablemente te despida, o no cobres y no puedas pagar el alquiler. Probablemente también te cabría el desalojo.

Eso está claro, y es a lo que apunta sea quien sea el candidato del oficialismo a recordárnoslo… teniendo en cuenta que a esta elección llega el recambio de la mejor de Cambiemos y la peor del peronismo (la del 2017), es probable que alcance.

Pero sería bastante progre creer que con eso alcanza para el futuro: “no critiquemos porque viene la derecha”.

Se critica porque falta mucho, y por una cuestión pragmática no hay un riesgo verdadero en estas elecciones.

No es votar a Scioli porque si no tenemos Macri para cuatro años, en este caso no se define eso. Allí quien gana corta el bacalao, un Presidente con un compromiso fuerte es capaz de hablar de enjuiciar a los miembros de la corte, o inclusive de nombrar miembros por decreto.

Pero en estas no, eso no se define…

Los legisladores porteños de Santa María votaron todo lo que entró del ejecutivo, quisiera saber desde que ingresó Santoro que cambios hubo en la escribanía parlamentaria de la Ciudad. Porque habla bien en los medios, pero no estamos votando para dar un Martín Fierro.

Eso significa, por un lado, que ser mejores que ellos no alcanza porque parte del electorado no tiene memoria y ellos lo saben. Bullrich como te baja las jubilaciones espera y es Ministra, ahora espera de nuevo…lo sabe bien.

Por otro lado, también significa que tampoco importa el número de diputados si el que ordena es quien está en el ejecutivo. Los legisladores porteños del Frente de Todos dicen que no se puede hacer nada por la correlación de fuerzas, porque son proyectos que manda el Ejecutivo.

Y el ejecutivo nacional, ¿No es nuestro? No hace falta 7 diputados, hace falta decisión política. Y en ese marco es cuando salen las proclamas de comunismo y todo lo que arroja la derecha.

Nosotros tenemos al caballero rojo, pero no por el color, porque el honor de vencer es su premio, combatir como un gran caballero. La verdad, la justicia es su sueño y en la lucha será siempre el primero.