SEREMOS INCORRECTOS O NO SEREMOS NADA

En la editorial anterior se tocaba el tema de los extrapartidarios en elecciones que luego formaban parte del oficialismo, como es el caso del binomio Bullrich y Petri en el gabinete de Javier Milei.

Recordando el golpe del ´55 y la rápida sumisión de buena parte del radicalismo, del honesto Illia. Del PS y su negocio por cargos como el que obtuvo Alfredo Palacios. Hoy le pone nombre al anexo del Senado.

La traza de la Av. Juan B Justo se llamó 17 de octubre cuando Perón finalizó su construcción, sin embargo desde el golpe del ´55 lleva el nombre de como se la conoce actualmente. Juan B. Justo fue el diputado que fundó el socialismo, es decir, que los militares le pusieron el nombre de un socialista en reemplazo del que tenía esa arteria.

Otra muestra de época.

En aquel golpe militar, el único que no fue cívico militar de la historia, todos los partidos se unieron contra Perón. Sin embargo no tuvieron el apoyo del pueblo porque la suma de las partes es menor que el todo, que las masas.

¿A quiénes representan? ¿Estarán dentro de ellos los argentinos de bien, como remarca Milei y Macri?

La Libertad Avanza ganó por mayoría en el balotaje, y de manera considerable. ¿Cuánto tardarás muchos votantes en darse cuenta que no son considerados argentinos de bien, o en su vocabulario mercantilista, su público objetivo?

La moralidad, el bien y el mal, no es nueva. Es un ellos o nosotros más elegante. Si hay del bien es que hay del mal (los orcos).

Un periodista comentó que era una lástima no contar con la presencia de todos los presidentes del retorno a la democracia sentados el día de la asunción de Milei cuando se cumplieron 40 años desde su regreso.

Obviando a De La Rúa, Alfonsín, Menem y Néstor, ni Puerta, ni Camaño, ni Rodriguez Saá, ni Duhalde, ni Macri, avisaron que iban a asistir al evento. Si lo iban a hacer Cristina y Alberto que estaban cumpliendo funciones. Finalmente fueron todos.

El colega pensaba como en otros países como en Estado Unidos hay imágenes de todos los Presidentes cargando el féretro cuando un ex mandatario fallece o poniéndose todos a disposición cuando ocurre un suceso que identifican importante. Que no hace falta irse tan lejos porque en Uruguay y Chile el trato entre ex Presidentes es cordial.

Quizá sea incorrecto mencionar que eso no significa nada. Que en nuestro país a diferencia de los antes mencionados se vive distinto la política, con un pueblo que toma como propia las ideologías y las defiende porque en ellas se juega su ética.

Que el status quo no se mueve en esas naciones, y la izquierda y la derecha tienen más coincidencias entre sí que con los propios votantes de cada uno. Uruguay recauda, y recauda, no importa si el dinero es del trabajo de Susana Giemenez, Galperín o un narco.

Hace semanas un narcotraficante buscado hizo trastabillar a medio gabinete de Uruguay que le facilitó la ciudadanía para que deposite su dinero espurio. Se puede allí abrir una línea de lo que significa Lacalle Pou, sin embargo, y a los fines de esta editorial es verdaderamente rescatable el esfuerzo que hace “la oposición uruguaya” por no levantar demasiado la voz. “Ser tranquilos” es un defecto, aunque lo vendan por virtud.

Argentina, este infierno terrenal, le da cobijo a la mayor cantidad de migrantes uruguayos. En otras palabras, somos el país que tiene más uruguayos fuera de Uruguay, la panacea.

¿Nadie dice nada? La moral, el bien…

Esto no ocurre sólo ahora, sino que también la gente se iba con Mujica “el bueno”. ¿Nada dicen de él? Que el chivito no tape el bosque. Es fácil que se den la mano si entre ellos no se dicen nada. 

Lo mismo ocurre entre Boric y Piñeira en Chile, personas que perdieron la visibilidad en una represión, protestas en la calle, ¿No tiene ni una causa?

En Estado Unidos, ¿Obama mandó a auditar la obra pública de Bush? No eran tan distintos. ¿Qué dijeron de Kissinger? De la compra de armamento…

Por eso es que están todos los presidentes en la foto, porque se respeta el status quo. Acá dos periodos que no se tocan entre ellos y gana uno que habla con los perros. ¿Es la mejor salida? No lo creo. Pero hay que escuchar al ciudadano, el argentino y la argentina no banca que todo esté estático.

Si Macri persiguió hasta debajo de las baldosas a la hija de Cristina, ¿Cómo va a darle un abrazo? No es negativo, es tener convicciones. Después dicen “¿para qué te metes si son todos amigos? Bueno, se ve que no.

Para terminar un recuerdo menemista. El golpe a Perón del ´55 con el que comenzó esta editorial fue ideado por un almirante que ostentó la vicepresidencia libertadora, de hecho cambiaron los Presidentes (primero Leonardi y luego Aramburu), pero él siguió siendo vice. Se trata de Isaac Rojas. 

Pocos días después de asumir la Presidencia de la República, en julio de 1989, Carlos Menem visitó al almirante Isaac Rojas en su domicilio ubicado en la calle Austria – entre Santa Fe y Arenales -. Para sorpresa de todos, lo abrazó y le dió un beso, queriendo simbolizar el fin del enfrentamiento entre los argentinos que había caracterizado los últimos 45 años de nuestra historia. Lejos de cumplir ese cometido fue espantoso. Simbólicamente un hermano peronista estaba abrazando al que intentó matar al viejo. Que se podía esperar del turco de ahí en adelante. 

Alberto lo abrazo a Macri en la asunción y previo a ello, en Luján. Que se podía esperar de Alberto.

Los presidentes no se pueden reconciliar porque si lo hacen dejan tirados a sus votantes, porque se puede unir lo que está roto, no lo que nunca fue algo. Los Argentinos de bien nunca existieron, siempre fue el pueblo Argentino.