Legisladores porteños del Frente de Todos calificaron como «miseria electoralista» la medida del ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires que bonificará a los docentes que no hayan realizado paros durante el primer semestre de 2023 y señalaron que es una «operación de marketing» que pretende la «autoexplotación» de los trabajadores.
El jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel, y la ministra de Educación de la ciudad de Buenos Aires, Soledad Acuña, ratificaron este miércoles el pago de una «asignación extraordinaria» a los docentes que no hayan realizado paros durante el primer semestre de 2023 y que se financiará con lo recaudado de los descuentos realizados a los trabajadores que hayan ejercido su derecho a huelga, a pesar de las críticas de los gremios docentes.
En un comunicado publicado en sus redes sociales, los legisladores de la oposición porteña indicaron que «esta medida no es un hecho aislado, se da en el marco de un inmenso desprestigio a quienes ejercen la docencia por parte del GCBA».
A su vez, remarcó que la cartera dirigida por Soledad Acuña tiene un «profundo desconocimiento» sobre la «feminización del trabajo docente».
«El sistema educativo de la Ciudad de Buenos Aires está compuesto por un total de 97.094 docentes, de los cuales un 65,4% son mujeres, muchas de las cuales son madres cuidadoras», resaltó el comunicado.
El bloque opositor calificó a esta medida como una «miseria electoralista», que pretende «auto explotación y auto vulneración de derechos» exponiendo a trabajadores.
En tanto, denunciaron que el salario docente de la Ciudad de Buenos Aires ocupa «los últimos lugares en el ranking nacional».
Indicaron que esta medida «es una operación de marketing del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires», que provoca «distinciones innecesarias entre los docentes e invalida reclamos colectivos por una mejor educación en la Ciudad».
Por último, apuntaron contra el Jefe de gobierno porteño y actual precandidato a presidente de Juntos por el Cambio (JxC), Horacio Rodríguez Larreta, y contra la ministra Acuña, a quienes acuso de «demostrar su desprecio» contra los docentes.