No hace falta más que salir a caminar para cruzar las fronteras que separan las capitales europeas. Un barrio lleno de historia en los nombres de sus calles.
Nos propusimos publicar los orígenes acerca de los nombres de las calles, y para hacer honor al copete de esta nota comenzamos con una serie de capitales europeas. Luego vendrán también los nombres propios de quienes dejaron su marca en la historia Argentina/ Mundial.
Comenzamos el camino caminando por MADRID (la paralela a Juan B. Justo lleva el nombre de la capital española), sin sacar la visa nos escabullimos por Fragueiro y doblamos en VIENA (capital de Austria).
La capital austriaca llega a su par francesa, PARÍS, y cruzando la plazoleta nos sumergimos en Bélgica, más precisamente en su capital, BRUSELAS.
Sin necesitar ni un Euro, basta con las piernas y Arregui para conectar con ROMA, o sin parar en la capital italiana es posible caminar 100 metros más para llegar a Lisboa, la calle homónima a la ciudad principal de Portugal.
De tanto caminar dan ganas de sentarse, para eso puede parar en la Plaza Ciudad de Banff, que debe su nombre a otra ciudad europea, pero para eso tomemos aire y esperemos a la siguiente nota…