OTRA EDICIÓN DE LA MARCHA POR LA MEMORIA, VERDAD, Y JUSTICIA EN LA COMUNA 10

El viernes 18, partió de Av. Rivadavia y San Nicolás la clásica marcha que une el Orletti y el Olimpo en las vísperas de un nuevo día de la memoria.

En noviembre de 2020, el «Archivo Comunal de la Memoria» incluye un recuento histórico de los hechos represivos que sucedieron en la Comuna 10 desde 1962 en adelante. Está latente la idea de denominar a la Comuna 10 “Comuna de la memoria”, ya que tristemante durante la última dictadura cívico militar albergó tres Centros Clandestinos, miéntras que hoy alegremente se han convertido en espacios comunes en búsqueda de la memoria, la verdad, y la justicia.

Automotores Orletti, ubicado en Venancio Flores 3519, funcionó como centro clandestino de detención y tortura entre mayo y noviembre de 1976 y se estima que allí estuvieron secuestrados alrededor de 300 ciudadanos. La mayoría continúan desaparecidos.
El Olimpo, emplazado entre las calles Ramón Falcón, Lacarra, Fernández, Rafaela y Olivera; funcionó entre el 16 de agosto de 1978 y fines de enero de 1979; permanecieron cautivas aproximadamente 500 personas y solo alrededor de 60 han logrado sobrevivir.
Gracias a la investigación de más de 15 años del juez federal Daniel Rafecas en conjunto con el Equipo de Antropología Forense, documentos desclasificados y testimonios de dos víctimas y testigos que pudieron confirmar el descubrimiento de un nuevo centro clandestino de detenciones, torturas y desapariciones de personas; en el 2020 se descubrió que en Bacacay 3570, funcionó un Centro que llamaban “El Jardín”, un domicilio que alquiló inteligencia en la última dictadura.

El sitio “Nadie nos Invito”, documenta que en la década del ‘90 los vecinos del barrio comenzaron a pelear por la recuperación del sitio donde funcionó el Olimpo. Por entonces, pese a que se sabía que allí había funcionado un centro clandestino durante la última dictadura cívico militar, el predio seguía perteneciendo a la Policía Federal y era el lugar donde se realizaba la Verificación Técnica Vehicular (VTV). Para el barrio, era un símbolo de impunidad. Por ello, uno de los vecinos pensó que Floresta debía tener su propia marcha en donde se unieran los dos centros clandestinos que funcionaron en el barrio.