HAGAN LÍO

Nos dejó el argentino más importante en la historia universal.

Nos dejó digo porque emplear el eufemismo que partió hacia la casa de su padre o que su ingreso al reino de los cielos será festejado no va con quien tiró por tierra aquello de bienaventurados los que menos tienen porque será de ellos el reino de los cielos. Una frase que tanto disfrutaban usar las clases dominantes para sentirse menos miserables con sus dominados.

Probablemente el mundo sea peor desde hoy, pero todos somos seres finitos. Fue hoy como podría ser en un tiempo o mismo hace meses donde de manera increíble sorteó la muerte cuando estaba internado.

La cuestión es que será peor porque el legado será territorio de disputa, dicen que nombró dos tercios de los Cardenales que ahora decidirán quién será el futuro obispo de Roma, sin embargo, al igual que los jueces que un día fallan de una manera y a la mañana siguiente de otra, la mayoría de los cardenales son oficialistas. 

Designarlos no es garantía de continuidad de las ideas, más cuando hay tanto en juego.

Antes de Francisco el mundo era uno, en el medio pasó una pandemia, algunas guerras que hoy persisten y hoy es otro. Sin embargo hubo una continuidad en las familias que dejan para custodiar sus capitales en los bancos vaticanos.

Una persona que frecuentaba a Francisco en Roma y era muy cercano a Bergoglio en Flores decía que “el Vaticano era un 99.9 por ciento sucio antes de la llegada de Jorge, desde que llegó bajó a un 96 por ciento”.

Es más difícil quitar la corrupción que modificar el dogma, con lo complejo que es.

¿Qué queda para el pueblo?

Alguna vez Sabina dijo que a este Papa le tenía miedo porque a diferencia de los anteriores este sí creía en Dios.

Pasó algo curioso con su llegada al papado, el cambió probablemente más rápido de lo que lo hizo la sociedad. Cuando lo nombraron la derecha estaba feliz, y el progresistas como Verbitsky le armaban carpetazos falsos diciendo que había ayudado a los milicos.

El ex obispo Bergoglio que se opuso al matrimonio igualitario dijo años deapués ya nombrado Francisco que no era quien para echar a nadie de la iglesia y que Dios no se iba a perder que una buena persona se aleje de Él.

Dale dos minutos poder a una persona y verás cómo verdaderamente son.

Eso dejó en offside a todo el arco político. Hasta que las cosas se acomodaron totalmente opuestas a como eran.

Por eso, no quiso venir.

Un pastor con olor a oveja.

En las últimas décadas, la iglesia había tenido un gran descrédito. Sobradas son las razones. El devolvió la fe a esa vetusta institución que desde hoy volverá a la decadencia que nos acostumbró probablemente.

La cruz que tengo colgada en el pecho no es por haber ido a colegios de monjas, es por él. Las misas vacías tuvieron más concurrencia y los lugares vulnerables rezaron por él.

¿Cómo continuar el legado? Haciendo lío.