Hace unos años, el entonces Ministro de Seguridad de la Provincia, Sergio Berni, deslizó un tiro por elevación a Cristina Kirchner al criticar al Presidente Alberto Fernández. Dijo “el que trajo al borracho que se lo lleve”. Puntos suspensivos.
El miércoles la marcha de los jubilados era el salvoconducto que pensó tener el Gobierno para tapar la crypto estafa y volver a marcar agenda. Cada vez les cuesta más, ya no alcanza con un viaje relámpago de Milei a Bahía Blanca para que no lo escrachen y con el que creía correr el eje de la discusión… Por la tarde sucedieron dos hechos.
Dentro del Congreso cuando estaban los votos para voltear facultades delegadas se dio un conflicto interno de La Libertad Avanza. Algunos legisladores del oficialismo se sentaron para dar quórum en la sesión especial dado que evitaban que se cayera la designación de la Diputada Pagano al frente de la Comisión de Juicio Político, lo que nunca fue del agrado de Karina Milei, la que tira las cartas y antes se acomoda la baraja, y terminó con la expulsión de Zago como Presidente de la bancada libertaria. De hecho el miércoles sus ex compañeros de bloque no dejaban que se sentara en su banca.
Sumamente importante es recordar que pasó lo que todos creían que iba a ocurrir si le votaban las facultades delegadas al Presidente. Puntos suspensivos.
Fuera del Congreso: la represión. Policías sonriendo y abuelos combativos. Hinchas, muchos.
Que fueron para estar. Movidos sin otro objetivo más que la esperanza. Sin norte. Triste final.
Nos acostumbramos a las manifestaciones que no esperan resultados, es decir, siempre que las fuerzas vivas de una sociedad se mueven es para causar una consecuencia. Si despiden a un trabajador, el gremio hace un paro y entonces se reincorpora el trabajador.
Desde hace una buena cantidad de años no existe la espera de un desenlace ¿Qué se esperaba lograr con la manifestación del miércoles? ¿Qué el Gobierno aumente las jubilaciones? Si eso no iba a suceder… ¿Para qué se marchó?
Distinto es si la manifestación es como decían los medios de derecha: para desestabilizar al Gobierno. En ese caso sí cumple con la premisa de causa y efecto.
Pero si eso sucede es un lío bárbaro.
¿Alguien piensa que existe un político capaz de canalizar el descontento social?
Puntos suspensivos dije sobre lo que ocurrió en el Congreso porque lo retomo ahora, alguien piensa que los mismos que negocian otorgar facultades delegadas, o hacer el juego de opositores siendo que el oficialismo perdió en las generales y por tanto metió menos diputados que la primera oposición y todo lo logran con legisladores que se van a dormir ricos y se despiertan asquerosamente millonarios ¿Pueden canalizar un desgobierno?
Entonces cierro con el primer tema que dejé en puntos suspensivos, la frase de Berni. Muchachos, los que trajeron al loco que se lo lleven. Porque la represión surge de un Gobierno que hace lo que quiere y lo dejan hacer. Porque lo inflaron desde afuera cuando era candidato. Porque la gente sale a manifestarse a los tumbos porque hay orfandad dirigencial, de una dirigencia que para colmo trajo a Milei.
Los que trajeron al loco que se lo lleven. Porque sino se van a ir con él.