El gobierno de Marzo hasta hoy cayó 10 puntos su imagen positiva. Es lógico. ¿Es lógico?
Las políticas de ajuste producto de una gran devaluación inicial que provocó una inflación del 25 por ciento, que de tanto repetir ya hacen pasar por cierto que es responsabilidad del gobierno anterior hizo que los magros salarios aun esten peor.
El disparo de muerte ya estaba efectuado sólo faltaba desangrarse. Pasados los meses se termino la escasa espalda que había dejado Alberto Fernández, es decir, en el 2016 se podría haber hecho frente al ajuste con el resto de lo que dejó el gobierno saliente, en este caso no.
A los tres meses ya no había ingresos necesarios para el consumo. Las PyMes destrozadas, y con el tiempo, aperturas y aumento en tarifas los industriales también comenzaron a trabajar a la baja.
Cuando esto sucede comienzan los despidos, ya no como los primeros donde el Estado se mostraba orgulloso por cesantear gente, sino los dolorosos despidos de despedir a un empleado/amigo lo que muchas veces termina acarreando problemas de salud, depresión, de presión, problemas cardíacos. Ni hablar del que queda en la calle…
La gente se manifiesta y es reprimida.
¿En qué parte del cuadro de situación que describí recién no está lo que todos sabíamos que era Milei antes de asumir?
Antes de diciembre, Milei hablaba con perros muertos en un gabinete paralelo, decía que los órganos eran un mercado más, maltrataba a las mujeres, era parodiado siempre por imitadores que se enfurecian, y decía que el peso no vale ni excremento.
La verdad que no entiendo cómo bajó 10 puntos su imagen, si es menos malo de lo que prometía ser.
Si hoy no se aprueba el presupuesto universitario en el Senado, tiene algùn peso en la gestión del peluca. No olvidemos que él quería un modelo donde se pongan “vouchers educativos”.
¿Cuál es la sorpresa?
Los que dejan de apoyar al Presi en principio son los que votaron por ser “anti”. Es decir, Milei salió segundo en las elecciones pero para que no gane Massa votaban a cualquiera en el balotaje, en este caso a Javier.
Ahora viene lo más trascendente para un futuro. Los que pensaron que era necesario un ajuste para mejorar. Esa frase tiene al menos tres mentiras: la primera es creer que no había ajuste hasta diciembre, la segunda es el sadismo de votar por el ajuste a sabiendas que va a ser así, y va de la mano de la tercera que es ser catador de ajuste, lo que se traduce en “te aguanto el ajuste hasta que me joda a mi”, sin importarle el otro.
Sadismo e individualismo. ¿Qué es Milei?
Esto es trascendental para el futuro porque la disyuntiva es si decirle: mire jubilado, usted que lo votó, desde diciembre hasta aquí ha perdido un 60 por ciento de poder de compra. Adquiere menos de la mitad de lo que podía comprar. Hágase cargo de lo que votó. O decirle lo mismo sólo que en lugar de la última frase proponerle una alternativa.
Lo mismo para todos los sectores de la sociedad, si ganó con el 56 por ciento tuvo 6 de cada 10 jubilados, 7 cada 10 menores de 30 años, y otros tantos porcentajes elevados.
Lo complicado no es tener ese pensamiento reflexivo, el político es de ser compasivo por demás, el problema es construir una alternativa.