El diputado nacional del Frente Renovador, Alejandro Grandinetti,
dio su opinión de los Panamá Papers que en sus palabras
“inevitablemente genera un daño al país”. Además, el periodista
rosarino comentó cuáles fueron las razones por las cuales decidió
volcarse a la política partidaria.
¿Cuál es su opinión en torno a los Panamá Papers?
Creo que los paraísos fiscales son una suerte de Disneylandia para
algunos empresarios, y en otros casos es un recurso peligroso para
hacer circular dinero proveniente de cosas ilícitas, como por
ejemplo el narcotráfico. Algo de eso parece que motivó la
investigación, la primera reflexión es que conocer que un empresario
tenga esas empresas puede ser reprochable pero no ilegal, pero
cuando se involucra al Presidente hay un daño inevitablemente al
país que ese mandatario representa. Desgraciadamente no es la mejor
noticia para el Gobierno, y no debemos subestimar el hecho.
Con sus compañeros del bloque del FR pidió que Macri brinde una
conferencia para hablar del tema…¿Lo convenció lo que declaró el
Presidente?
Lo que pasa es que la conferencia de Mauricio llega tras la
investigación de un fiscal. Es necesario que investigue la justicia,
existe una confusión de roles con un Presidente que contesta como
empresario y una oficina anticorrupción que es más partidaria que lo
que cumple con su funcionamiento normal.
¿Qué piensa de la titular de la Oficina Anticorrupción, Laura
Alonso?
Hay dos hechos que no me terminan de cerrar, los contratos de YPF y
los Panamá Papers. Esto requiere una madurez política, en lo
personal me parece una buena persona y no tengo nada en contra de
ella, pero sí contra la función que está ejerciendo. La oficina no
es eficiente en cuanto a buscar la transparencia en Argentina, o por
lo menos eso demostró en cuatro meses.
Hace un tiempo, usted aseveró la frase de Perón “somos todos
peronistas”. ¿Sigue pensando igual? Me siento en la corriente del pensamiento nacional, cercano a la
doctrina social de la iglesia, lo novedoso de Perón fue escribir una
doctrina fuera de la praxis política partidaria, el PJ es una
herramienta para cumplir ese deber ser de la doctrina. Gran parte de
los postulados en la doctrina es un commodity que tienen todos los
partidos políticos en la actualidad, creo que no alcanza describirse
peronistas en la práctica política. Me siento cómodo con esa
postura.
¿Qué cree aportar a esta nueva conformación en Diputados? Después de 28 años como periodista, pude ver el inicio de
estrellas políticas y su final. Sería muy presuntuoso, como diría
Fontanarrosa, pensar que yo le voy a aportar algo a la política.
Cuando tenía 24 años y Carlos Reutemann me ofreció meterme dentro de
la política partidaria decidí no hacerlo porque creía no estar
maduro, hoy con casi 50 años me siento preparado. El último acto que
me hizo decidirme por volcarme a la candidatura es un hecho que le
sucedió a un amigo en Rosario, cuando después de una entradera
asesinaron a su hijo. Su discurso en una convocatoria que realizó en
el Monumento de la Bandera me llegó muy hondo.