Tras sancionarse la Ley que autoriza al Poder Ejecutivo a
concesionar edificios del Jardín Zoológico (actual Ecoparque), la
legisladora Lorena Pokoik emitió un comunicado en donde asegura que
“el Gobierno continúa privatizando los espacios públicos de la
Ciudad”.
“Es de mucha gravedad institucional que la Legislatura delegue al
Ejecutivo facultades que son intransferibles, según la Constitución
de la Ciudad, por varios motivos:
En primer lugar porque implica una delegación de poderes al Poder
Ejecutivo con atribuciones que son propias del Poder Legislativo,
como la entrega de concesiones por un plazo mayor a 5 años. En
segundo término, porque privatiza 3.5 hectáreas del espacio público
para la explotación del sector privado.
Otro aspecto central es que el proyecto no respeta el patrimonio
histórico, arquitectónico, paisajístico y ambiental. Recordemos que
las hectáreas que abarca el ex Jardín Zoológico son áreas de
protección histórica que plantea restricciones por estar afectados
como distrito urbanización parque, lo cual implica la prohibición de
la actividad comercial y publicitaria en el predio.
Mucho más grave aún es el empeño que el oficialismo puso para
favorecer al sector privado, ya que dichos emprendimientos serán
arancelados para el público y van a obtener una tasa de rentabilidad
sin quedar claro cuál es la inversión realizada. Por lo cual la
ecuación económica financiera, lejos de favorecer los intereses de
los vecinos y vecinas que habitamos en esta Ciudad, implica una
transferencia de fondos públicos al sector privado.
Otro dato alarmante es la muerte de 120 animales y que el proyecto
no priorice su preservación, traslado y las condiciones sanitarias
de los animales en cautiverio en el proceso de transformación del ex
Zoológico porteño.
Es tan espurio como este proyecto está hecho a pedido del sector
empresarial, que el costo de inversión ha sido expresado en dólares
(58 millones), una buena forma de cubrirse las espaldas frente a la
inflación que se niegan a reconocer frente a la sociedad y la
Legislatura a la hora de votar el presupuesto para la ejecución de
las políticas públicas. Por tanto los márgenes de "errores" de
cálculo de inflación lo paga la clase trabajadora y no los
empresarios.
Para nosotros donde hay una necesidad hay un derecho, para el
Gobierno donde hay una necesidad hay un negocio, Ecoparque surge de
esa concepción.
Por último nos preguntamos cuál va a ser el destino y las garantías
de los más de 300 empleados”.