Los vecinos de la Comuna se
niegan a formar parte del prueba y error, y desaprueban la creación
de una “zona calma” de 43 manzanas. Sería la primera en la Ciudad.
Con la excusa de reducir accidentes viales, el Gobierno crea una
“zona calma” en Villa Real, una obra en la que incorporarán 1.362 m2
de suelo absorbente y se dará continuidad a la red de ciclovías en
torno a 43 manzanas.
Así lo expresa el Ministerio de Desarrollo Urbano y Transporte, a
cargo de Franco Moccia, que pre adjudicó la obra a la empresa
Miavasa SA por $13.558.488 (Licitación Pública N° 630-SIGAF/17).
Según el pliego de condiciones particulares de la obra, se
desarrollará entre las calles Ramón Lista, Juan E. Martínez, Nogoyá
e Irigoyen. Con distintas intervenciones urbanas se buscará “alertar
al conductor del ingreso a la zona 30, donde la velocidad máxima
será de 30km/h en lugar de 40, y reordenar el tránsito de camiones;
incorporación de 1.362 m2 de suelo absorbente”.
También se busca “fomentar el uso de la bicicleta y dar continuidad
a la red de ciclovías”, generar “cruces más seguros” y ejecutar
“sendas y señalética con lenguaje Entorno Escolar”.
Según este documento oficial, los beneficiarios “son los 14.000
habitantes de la zona y las familias cuyos hijos concurren a las 6
establecimientos educativos que se encuentran en la misma. La
finalidad de este proyecto es lograr que los siniestros (56
accidentes entre el año 2011-2015) se reduzcan considerablemente”.
Que el proyecto alcance a 188 cuadras es en teoría para bajar hasta
el 75% la probabilidad de accidentes.
Según el secretario de Transporte porteño, Juan José Méndez, el plan
está inspirado en grandes ciudades del mundo, beneficiando a los
habitantes del barrio gracias a la incorporación de más de 400
metros cuadrados de sector peatonal y más de 1400 metros cuadrados
de espacio verde.
Las obras comenzaron en Cortina y Varela, fue en ese momento que
vecinos se acercaron empleados de la empresa Miavasa e intentaron
mostrar su punto de vista.
En primer lugar porque el Gobierno eligió comenzar con este tipo de
proyectos en una barrio en el que los vecinos no pretenden ningún
cambio en la movilidad de traza urbana, donde la mayoría tiene o
menos de 16 años o más de 50. Donde la bicisenda desembocará en una
zona que está prohibido el uso de ese rodado, por lo cual, sólo se
usaría en las cuadras de la Comuna sin mayor sentido. Dónde se
modificaría el paisaje habitacional de personas acostumbradas
durante décadas a ver las mismas veredas que se harían peatonales
sin necesidad.
Ahora bien, un numeroso grupo de vecinas y vecinos de Villa Real se
hicieron presentes en la Escuela Ecea, habiendo sido convocados para
recibir información del Gobierno de la Ciudad sobre la construcción
de esta Zona Calma. De forma imperativa, el dia anterior anunciaron
que la reunión se suspendía hasta nuevo aviso, pero muchos vecinos
no se enteraron y se apersonaron en la explanada de la Iglesia
Transparente para obtener información.