El relato de una vecina que lo contrajo corrió igual suerte que el
pedido de informes de la Comuna, el Gobierno tampoco no da
respuestas. Delicado momento el que vivimos en la 10.
Como si evitar frenar al coronavirus sea poco, el flagelo que mayor
número de infectados tiene es el producido por picaduras del
mosquito Aedes: dengue. Al menos así lo informan desde el sitio
Nadie Nos Invito, lo que muestra el momento crítico sanitario de
nuestros barrios.
“Mi nombre es Laura, tengo 56 años y hace 20 vivo en César Díaz y
Cervantes, barrio de Vélez Sarsfield. En diciembre vi mosquitos
aedes aegypti, descacharré mi casa, avisé a mis vecinos y llamé al
147.
No pasó nada.
El 3 de marzo me infecté de dengue. El primer día anochecí cansada
al extremo, con dolor en todo el cuerpo y la fiebre subiendo hasta
40 grados. Al otro día llamé al médico a domicilio y luego de
revisarme, al no tener otro síntoma respiratorio ni de garganta, me
recetó la prueba para dengue.
Me atendí por Obra Social. Me realizaron un hisopado, una placa y la
prueba del dengue, que demora varios días. Del análisis de sangre
surgió que tenía el conteo de plaquetas muy bajo y eso presume
dengue, es uno de sus síntomas.
La enfermedad consiste en un dolor general de todo el cuerpo, dolor
detrás de los ojos y fiebre. La piel se pone sensible, todo pica, y
mucho. Molesta hasta secarse con una toalla. Pasé cuatro días
horribles, sin comer casi nada, y una semana recuperándome.
El 11 de marzo repetí mi denuncia en el 147 y tres días más tarde mi
hijo también se infectó. Finalmente, me contestaron el 28 de marzo:
“El personal del Plan Estratégico no pudo identificar el problema
que originó tu pedido. Con esto el trámite se considera cerrado y
desestimado.
El mosquito está instalado en el barrio. Es necesaria una acción más
contundente que la acción que hacemos cada uno. Es necesario que el
Estado esté presente en esto también”.
Desde febrero el virus del dengue está afectando de manera muy
pronunciada a las y los vecinos de la Comuna 10, siendo uno de los
focos con más casos de la Ciudad. Según datos del Boletín
Epidemiológico semanal de GCBA, la Comuna 10 está en el cuarto lugar
de las comunas con más casos de dengue, detrás de la 7, la 8 y la 4.
Profesionales del Hospital Vélez Sarsfield confirmaron que hasta el
viernes 27 de marzo había al menos 300 infectados en los seis
barrios que la integran, y que el número aumentaba en un promedio de
10 casos por día.
Los profesionales volvieron a marcar que los barrios donde se
concentran la mayor cantidad de casos es en Monte Castro, Vélez
Sarsfield y Floresta.
Esta semana se conoció un documento presentado por el Presidente de
la Comuna 10, Mauro Pedone, donde se detallan los distintos reclamos
de los vecinos y la respuesta estatal recibida.
El documento contiene más de 100 denuncias y pedidos de intervención
de los vecinos pero gran parte de ellos fueron desestimados por las
autoridades. Allí se lee denuncia una vecina que exige que fumiguen
en la calle Bruselas al 700 ya que asegura que ahí “mantienen
recipientes con agua estancada, dónde están criándose aedes aegyptis
que vienen para mí casa. Yo ya tuve dengue recientemente, y esto
pone en grave riesgo mi salud en caso de contagiarme nuevamente”.
Sin embargo, la respuesta que aparece en el documento es “Enviado a
Educación”.
A su vez, en el documento tampoco quedan claros los criterios para
atender algunos reclamos y desestimar muchos otros.
“Nosotros tenemos dos vías de ingreso de los reclamos: una es la que
ingresa a través de la sede comunal y otra que ingresa cuando llama
al 147”, dijo el comunero Fernando Moya, “no la vemos ya que se la
mandan al área programática, que es la que define. Y no sabemos cuál
es el criterio para atenderlo o desestimar”.
“Estoy muy caliente con el tema dengue por dos factores: primero, no
se utilizó la base de referencia de lo que había sido el brote de
2016 y tenés casos, como por ejemplo el brote de Belaustegui y Tupac
Amaru o el de Elpidio González, que prácticamente repiten lo
sucedido en 2016. O sea, que no se trabajó bien porque eso debería
haberse prevenido. Eso se hace en invierno, durante los meses de
septiembre octubre y noviembre, y ahí no se hizo nada, porque no
sirve de nada hacer trabajo de prevención cuando el foco ya explotó.
Y otra de las cuestiones que me enojan enormemente es que el
supuesto trabajo de foco tampoco se hizo, porque el contacto que vos
pasabas de las personas infectadas iban a ver sólo a las personas
infectadas y no se hacía el trabajo sobre el resto de la manzana,
cuando se sabe que el radio de acción del mosquito es de 100 metros.
Entonces también se trabajó muy mal y eso habla de los muy malos
resultados que tuvimos en la comuna”.