Un grupo de diputados nacionales ingresaron en la Cámara Baja el
proyecto de Ley Nacional de Alquileres que impulsan las
organizaciones de inquilinos de todo el país. De esta forma, la
iniciativa ya fue ingresada en ambas cámaras del Congreso.
Recordemos que, a principios de 2016, la senadora García Larraburu
ingresó el proyecto de Ley Nacional de Alquileres de la Federación
de Inquilinos Nacional.
La iniciativa en cuestión fue discutida durante todo 2016 en
distintas reuniones de comisión del Senado, se introdujeron
modificaciones y se aprobó por unanimidad en noviembre de ese año.
En Diputados, el tema estuvo paralizado durante mucho tiempo. Recién
se discutió cuando Mauricio Macri, en octubre de 2018, reconoció la
necesidad de avanzar en una nueva Ley de Alquileres y encomendó a su
bloque parlamentario a impulsar ese debate en Diputados.
Rápidamente, el proyecto que contaba con media sanción de Senadores
obtuvo dictamen favorable en la Comisión de Legislación General de
Diputados. Sin embargo, por presión del mercado inmobiliario y por
disputas internas dentro del oficialismo; el proyecto no se trató en
el recinto antes de la finalización de las sesiones ordinarias y
perdió estado parlamentario.
Ante esta situación, y considerando que los consensos para aprobar
el proyecto habían sido alcanzados en octubre del año pasado; el
sector de Inquilinos Agrupados exigen que se dé tratamiento
inmediato a este proyecto de ley, particularmente a los presidentes
de las comisiones de Legislación General de Diputados y Senadores,
Daniel Lipovetzky y Ada Itúrrez de Cappellini y en general, a todos
los legisladores del país y al Gobierno nacional.
Recientemente, dieron a conocer los resultados de la 3° Encuesta
Nacional a Inquilinos y los resultados demuestran, una vez más, la
urgencia de avanzar con una regulación del precio y el plazo de los
alquileres. Como dato saliente, un inquilino destina (en promedio)
el 47% de sus ingresos en el pago del alquiler y que esa cifra
aumentó en 6 puntos porcentuales durante el último año. Además, casi
un tercio de los encuestados afirmó que tuvo que rescindir
anticipadamente su contrato durante los últimos seis meses por
dificultades en sostener el pago del alquiler.
Gervasio Muñoz, presidente de la Federación de Inquilinos Nacional,
afirmó “lo que observamos diariamente es la intensificación de una
crisis habitacional que se expresa en inquilinos que tienen serias
dificultades para afrontar el pago del alquiler, muchos de ellos
rescinden sus contratos para no acumular deudas, mientras que otros
aún permanecen en las viviendas que alquilan, haciendo lo imposible
para pagar los gastos fijos y llegar a fin de mes. A todos ellos, el
Congreso les debe una respuesta. El gobierno nacional y los
legisladores ya no pueden permitirse más dilaciones en este tema”.