Tres jóvenes desvalijaron a un vecino tras drogarlo. Ivo Julián, es
el abogado de 24 años que había invitado a las chicas a su casa a la
salida de un boliche en San Telmo.
A dos de las llamadas "viudas negras", la policía las describió con
el apellido Benítez y son nacidas en la ciudad de Formosa.
Luego de salir de la disco en San Telmo, el abogado las invito a la
casa que comparte con su padre en Irigoyen y Juan Agustín García.
“Quedamos tres hombres y tres mujeres. Después, dos de ellas
simularon quedarse dormidas”. Luego, la tercera joven, que sería la
cabecilla de la banda, acusó haberse manchado la ropa con un vino
espumante y luego se le apareció en ropa interior.
“Me quiso hacer oler esa mancha de vino y uno, en la inocencia, la
olió. Tenía un olor nauseabundo. Después me dijo que tome el
espumante para sacar ese sabor y tomé”, indicó. En ese instante, el
abogado se fue al baño y la mujer les pidió a los amigos que se
fueran del departamento para tener relaciones sexuales con su amigo.
Una vez que se retiraron, el joven quedó inconsciente y las mujeres
procedieron a desvalijar la casa y huyeron.
El abogado recuperó la conciencia tras la llegada de su padre, que
es médico, y lo reanimó, pero por 26 horas deambuló en estado
somnoliento y débil.
Una vez recuperado, comenzó su investigación por Facebook y dio con
dos de las tres mujeres.
Fue así que “Las hermanas Benítez” de 19 y 24 años se entregaron a
la justicia después de que sus rostros fueran difundidos por la
cámara de seguridad conectada al inmueble del abogado robado. La
tercera "viuda", que sería la cabecilla de la banda, sigue sin
aparecer.
Se conoce que la restante se llama Florencia, de 29 años, es la
morocha que aparece en el video en ropa interior.
"Hay que ver si las hermanas Benítez buscan desvincularse acusando a
la tercera chica, que aún no apareció", dijo una fuente policial.
Hasta el momento, dijeron “no ser ladronas” aunque aparecen en el
video.
Cuando comenzaron con su accionar eran las 7 de la mañana del
domingo 5 de febrero, en palabras de la víctima, “ellas se fueron a
las 12:44 del mediodía y se llevaron todo en bolsas de consorcio y
algunas mochilas que tenían”. Todo es su billetera, celular,
artículos de decoración de la casa, relojes y hasta recetarios
médicos y el sello de la firma de su padre.
Se espera dar con el paradero de la tercer chica que resta detener,
para concluir con la historia de las viudas negras en el barrio.