Desde la CAME aseguraron poder aportar la plata para levantar la
protesta de los manteros linderos a la Plaza Miserere, y salvar al
Gobierno porteño tras un estéril intento de desalojo.
En el barrio de Balvanera un grupo de personas que venden productos
mayoritariamente textiles, de forma ilegal desde hace dos días que
se enfrentar a un operativo policial, en una escena muchas veces
repetida a lo largo de los años. Un problema que aun tiene final
abierto.
El Gobierno porteño dejó avanzar el mercado ilegal en muchas zonas
de la Ciudad, la existencia de manteros no les es ajena. En primer
lugar es el caldo de cultivo para determinar quién es él que le
vende la mercadería, de dónde la saca, y cómo se comercializa. Es
decir, si hay un tipo de puntero, si trabaja con la connivencia
policial, y los productos son derivados desde talleres clandestinos,
con la forma de esclavitud moderna: la explotación. Esto va más
allá, y es más profundo que vendedores sobre mantas.
Así las cosas, tras manifestarse y cortar las principales avenidas
de la zona se logró un acuerdo entre Gobierno y manteros por el
cual, todas las personas que sean censadas (hasta el momento son
600, pero se prevé que serán 800 (como sugirió el Ministro porteño
Andy Freire) y de esa forma comenzar a normalizar su situación, ser
trasladados a puestos en dos galpones ubicados en Balvanera, y la
realización de un curso obligatorio de emprendedurismo durante 60
días por el que percibirán un subsidio mensual de 11.700 (así lo
aseguró Osvaldo Cornide, titular de la Camara Argentina de la
Mediana Empresa, quién se hace cargo de ese monto).
Los vendedores senegaleses son quienes aún continúan en conflicto ya
que adjudican su problema a no tener documentos, en ese sentido el
Gobierno anunció que quienes aún tengan el permiso de residencia sin
vencer serán ayudados a completar los trámites.
Referentes de la oposición en la Ciudad remarcaron que “este
problema viene desde hace muchos años, y se nota puntualmente ahora
una decisión política para desalojarlos dándole todo lo que piden
por un proyecto inmobiliario, quieren construir macromanzanas es esa
zona en 180 días”
En torno a un conflicto con vendedores senegaleses, que denuncian
que no pueden censarse por carecer de documentos, los expositores
afirmaron que se los ayudará a tramitar todo lo necesario siempre y
cuando se sometan a estar en regla. "Los que no hayan terminado el
trámite de residencia los vamos a ayudar", señalaron.
Durante el desalojo trabajaron 250 efectivos de la nueva Policía de
la Ciudad y 350 personas del Gobierno de la Ciudad. En ese
procedimiento se levantaron más de dos mil puestos de venta ilegal,
cifra superior a los 800 que se estima censar.